martes, 10 de enero de 2012



 Arte en las organizaciones

Consultarte  se presenta como un método innovador para transmitir valores corporativos a través del arte 

Gustavo Blanco[1], convocado por el movimiento “X 200 más”,  formó parte de una muestra junto a artistas y profesionales reunidos con el objeto de generar una mirada proyectiva de nuestra realidad y proponer tanto acciones como recursos para los próximos doscientos años. “Nos pareció interesante incorporar el mundo empresarial al mundo del arte, demostrar que hay una falsa dicotomía instalada que debe ser superada. Tomemos de ejemplo la máquina de volar de Leonardo, en su momento parecía un absurdo y sin embargo ahora existe, trasladando diariamente millones de personas a lo largo del planeta”, explica Esteban Manzioni (D.I. “X 2oo más”).
Enmarcada en la exhibición celebrada en el Centro Cultural Recoleta, Blanco presentó "Consultarte”: el método de inspiración de valores corporativos a través del arte. Creador del método y director de la consultora explica: “Consultarte  es una propuesta alegre y expansiva. Está conformada por un colectivo de consultores/artistas que utiliza dispositivos artísticos como principal herramienta para producir transformaciones metabólicas, no conceptuales. A través del arte se busca emocionar, liberar, debilitar las defensas de los representantes del “no se puede” y desarticular las rutinas burocráticas que bloquean las fuerzas creativas. Esta experiencia apuesta a que las organizaciones trabajen por una civilización empática, en un mundo en crisis.[i]

Las empresas del siglo XXI son concientes de la necesidad de armonizar el trabajo cotidiano de sus colaboradores entre los cuales coexisten “Baby-boomers” (mayores de 50 años), Shadow boomers (40/49 años), miembros de la “Generación X” (30/39 años) y de la “Generación Y (25/29 años). Las barreras generacionales se acentúan cuando los más jóvenes naturalmente buscan quebrar la muralla jerárquica y trabajar más horizontalmente. La Generación Y, a diferencia de sus predecesores, ha desarrollado más el hemisferio derecho del cerebro ligado a lo creativo y a la combinación de nuevas ideas. Entonces la lógica de la competencia feroz y sus mensajes que apuntan a la fuerza de equipo, pero basados paradójicamente en el arcaico sistema de premios y castigos, obstaculizan finalmente la productividad a mediano y largo plazo.[ii] Asimismo la sensación global de incertidumbre impacta de lleno en todos los ámbitos de la vida, presentándose como una problemática preocupante. En ésta coyuntura es necesario anclar en valores y reforzarlos, la aplicación de distintos dispositivos artísticos asoma como un inmejorable procedimiento para recrearlos. Como decía Freud, el arte permite ver otra realidad, y el psiquismo creador de los artistas permite transgredir la barrera entre lo posible y lo imposible.

Adrian Werthein, Guillermo Feldberg y Gustavo Blanco
“Gustavo Blanco es un hombre talentoso, creativo e inteligente”, opina Adrian Werthein. Y agrega: “Este nuevo proyecto de unir el arte a la cuestión de los recursos humanos y articularlos seguramente va a ser muy exitoso. Tenemos un desafío bilateral dentro de las empresas: los que estamos tenemos la obligación de asegurar la renovación generacional y los que se incorporan tienen la extraordinaria posibilidad de desarrollar su potencial, apoyándose en el conocimiento de aquellos que han dedicado parte de su vida a trabajar en una organización. Lo tomo con muchísimo entusiasmo, porque esa es la función de los que somos mayores: incorporar a los que vienen detrás y ayudarlos a que sean mejores de lo que fuimos nosotros.”

EL ARTE COMO METODO DE INTEGRACION Y MOTIVACION
El arte es una actividad dinámica, un proceso creativo a través del cual se exteriorizan sentimientos, creencias, preocupaciones, deseos. En síntesis, una forma de ver el mundo, como aquella primera manifestación que utilizó el ser humano dibujando un bisonte en las cavernas… Todos los seres humanos tenemos escondido un artista, disponemos de sensibilidad estética y capacidad de crear, la mayoría de las veces opacada por lo que se espera de una “persona adulta”. Ello es consecuencia de que en nuestra sociedad la educación a través del arte se considera cosa de chicos; esos “locos bajitos” a los que canta Serrat, dibujan, cantan, actúan y aprenden a tocar instrumentos. Pero, con el paso de los años, el hegemónico paradigma enciclopedista pasiviza el aprendizaje olvidando que ¡el adulto también se aburre si no juega!
Esta realidad se traslada a la mayoría de las empresas, en las que los rastros de la educación a través del arte se borran en las arenas de las reglas normativas de una sociedad de espectros que juzgan, de defensas contra la creatividad.[iii] Éstas exhortan a sus empleados para que se comprometan, innoven y se entusiasmen, pero el tradicional concepto de capacitación que sostienen no busca el desarrollo humano, liberar la energía del individuo en estado creativo, ni fomentar el aprender a aprender.
Consultarte es una propuesta que consiste en explorar la dimensión artística existente en todas  las personas, poniéndola al servicio de aquellos líderes que prefieren habilitar a controlar, que estimulan el crecimiento personal como paso necesario para el crecimiento corporativo.

Gustavo Blanco y Guillermo Feldberg
Según Guillermo Feldberg, “Blanco tiene la cualidad de hablar el lenguaje de los contadores y el lenguaje de los psicólogos, constituyéndose como un “cuerpo calloso” que une  y armoniza los dos hemisferios cerebrales. Creo que Consultarte es un método que va a tener un fuerte impacto dentro de las organizaciones y sobretodo va a ser útil por la dinámica que ha adquirido este mundo, en el que el vínculo entre seres humanos tiende a disminuir. Es realmente una buena oportunidad para generar un cambio positivo.” Entonces una vez que la calidad de servicio que brinda una organización se transforma en un atributo que está fuera de discusión, el rasgo diferenciador tiene que ver con la experiencia de servicio que se brinda. A manera del efecto del espejo borgiano, la brecha entre clientes y colaboradores se acorta cuando se logra reflejar un colaborador feliz con su trabajo en un cliente feliz y satisfecho con los productos y servicios adquiridos.
Blanco explica: “Nuestra propuesta no es cambiar el mundo corporativo, pero si transformarlo. Con la música se gestiona, con el canto se gestiona ,con la actuación se gestiona.-El concepto de arte-gestión es una realidad creciente. Creemos que inspirar valores a través del arte es la forma más poderosa de generar un ambiente facilitador para la permanencia y la integración cultural en cualquier organización.”

CONSULTARTE: UN METODO INNOVADOR
Sabiendo que no hay una única receta para todas las empresas, se realiza una indagación obsesiva para detectar si los valores que cada corporación declama son los que se usan y se desea transmitir. Luego se elige el dispositivo artístico más adecuado.
En los talleres los protagonistas son los propios colaboradores quienes, guiados por consultores interdisciplinarios –con hemisferios cerebrales integrados-,  apre(h)enden los valores de sus empresas inspirados mediante dispositivos artísticos. La experiencia de la implementación de Consultarte ha mostrado que el arte ofrece nuevas perspectivas, contagia el entusiasmo entre los participantes, evoca al creador que hay en cada uno: cura, enseña y embellece. Nada se fuerza, todo se induce, construyendo entre todos el valor buscado a través del juego, el movimiento y la reflexión conjunta. Es una tendencia hacia una civilización empática y una apuesta de vida. 
Blanco se presenta como un “director de orquesta” abocado a un acto escénico en el que los cantantes, bailarines, artistas plásticos, comediantes, pintores, profesores de yoga y actuación divergen, y en el que él converge a lo que se pretende transmitir. Los participantes se ponen en contacto con su  cuerpo y sus emociones, con una canción inventada, una actuación amateur del grupo, practicando relatos de la propia historia de manera diferente, con humor compartido, con el juego, la mayor expresión de libertad del ser humano. Después se baja al día a día. ¿Cómo? Y… es un arte.





[1] Gustavo A. Blanco, Contador Público y Licenciado en Psicología, se ha desempeñado como Director del Banco Nación y como Director de Recursos Humanos de La Caja, además de haber sido parte del grupo societario de Coopers& Lybrand, y Consultor independiente en dirección y desarrollo humano. Aficionado al canto, el baile y la guitarra, ha plasmado su experiencia y sus cualidades en ConsultArte.


[i] Ver Jeremy Rifkin.
[ii] Ver obra de Daniel Pink ,entre otros.
[iii] Ver Stephen Nachnamovicht ,Free Play